jueves, 1 de enero de 2015

Propósitos

Mis propósitos en un principio eran los mismos de todas las personas.
Cosas banales, muy corrientes y que no merecen mención alguna.
Sin embargo, el día 31 de Diciembre, comprendí que debía pedir algo especial para mí: Vivir la realidad y disfrutarla.

Estaba totalmente dispuesta a ello, decidida, nada me iba a parar.
Nada, excepto los susurros de la noche.
Los cánticos de las sirenas que nadan en lágrimas de melancolía y que me tientan a hundirme en su mar particular.

Fui a dormir y soñé cosas maravillosas y dolorosas al mismo tiempo.

Soñé con un mundo de fantasía que adoro.
Soñé con alguien al que quiero con toda mi alma y al cual la muerte me arrebató.
Soñé con un amor imposible...

Y fui feliz.
Tan feliz que deseé vivir en aquel sueño por siempre.

Hoy es día 2.
Qué poco duran los propósitos de año, ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario